Bosch, proveedor especializado a nivel mundial de tecnología y servicios, continúa avanzando hacia un modelo de empresa donde la sostenibilidad no solo se mide por indicadores medioambientales, sino también por su impacto real en las personas. En su informe de sostenibilidad 2024, la compañía refuerza su compromiso con una transformación responsable que integra la diversidad, la salud laboral, la formación, los derechos humanos y el desarrollo comunitario como pilares esenciales. "Una empresa solo puede ser verdaderamente sostenible si también lo es para su gente. En Bosch apostamos por un enfoque holístico que combine tecnología, equidad y responsabilidad social a largo plazo", afirma Stefan Grosch, miembro del consejo de administración y responsable de sostenibilidad y relaciones laborales.

Inclusividad y diversidad en la cultura empresarial y el liderazgo
Durante el año pasado, Bosch ha seguido avanzando hacia una estructura de liderazgo más inclusiva. En 2024, uno de cada cinco puestos directivos estaban ocupados por mujeres, siendo el objetivo llegar a una cuarta parte en 2030. Así, la compañía impulsa diversos programas de mentoría, redes internas y formación en sesgos inconscientes como parte de su estrategia para garantizar la igualdad de oportunidades en todos los niveles. Por otro lado, la diversidad cultural impulsa el desarrollo de la empresa. Así, en Bosch trabajan juntas personas de alrededor de 150 nacionalidades. Esta diversidad le permite a la compañía cooperar exitosamente con sus clientes, socios y proveedores en todo el mundo. Las competencias interculturales son una exigencia diaria, que le sirve a Bosch para reforzar la colaboración internacional.

Salud y seguridad en el trabajo como prioridad
La seguridad de las personas empleadas, así como proporcionar un entorno de trabajo seguro, es otro eje central en la estrategia de sostenibilidad de Bosch. En 2024, la empresa alcanzó su tasa de accidentes laborales más baja hasta la fecha: 1,46 por millón de horas trabajadas. Esta mejora se debe a programas de prevención, cultura de seguridad y procesos de mejora continua en sus centros de producción. Para finales de 2025, el objetivo es continuar reduciendo aún más este número, hasta alcanzar 1,45 accidentes por cada millón de horas trabajadas.

Formación global para un cambio real
Desde 2014, más de 34.000 directivos de Bosch en todo el mundo han completado formaciones específicas en sostenibilidad. Solo en 2024 se ofrecieron más de 50 módulos formativos nuevos, integrando aspectos ambientales, sociales y de gobernanza (ESG). La compañía apuesta por un liderazgo consciente que sea capaz de integrar la sostenibilidad en cada decisión estratégica. Además, Bosch promueve una cultura viva de sostenibilidad con iniciativas internas como la World Tour of Sustainability, que en su edición de 2024 contó con 35 proyectos de sostenibilidad promovidos por equipos de todo el mundo, y con los galardones anuales Sustainability Awards, que reconocen buenas prácticas en todo el mundo y que, el año pasado, contó con más de 270 candidaturas, reflejando la alta motivación de la plantilla con la sostenibilidad.

Derechos humanos y cadena de valor responsable
Bosch trabaja con criterios de debida diligencia y transparencia en toda su cadena de suministro, especialmente en países de riesgo, conforme a su Sistema de Gestión de Derechos Humanos. También participa activamente en iniciativas y marcos internacionales, como el Pacto Mundial de la ONU, y colabora con plataformas sectoriales para elevar los estándares globales de responsabilidad corporativa. Al mismo tiempo, la compañía exige el respeto de los derechos humanos en sus cadenas de suministro globales. Por eso, Bosch ha intensificado la evaluación de proveedores en materia de sostenibilidad y cumplimiento de los derechos humanos. En 2024, más del 80 % de sus proveedores directos de materiales ya habían sido evaluados mediante cuestionarios, auditorías o certificaciones.

Bosch, un ciudadano corporativo responsable 
Durante 2024, Bosch destinó 25,8 millones de euros a programas sociales, educativos y de ayuda humanitaria. Por ejemplo, tras las inundaciones registradas en algunas regiones de España, la empresa activó donaciones específicas a la Cruz Roja y apoyó directamente a familias afectadas. Este tipo de actuación local forma parte de la identidad de Bosch como ciudadano corporativo responsable.

Como fundación independiente sin ánimo de lucro, Robert Bosch Stiftung GmbH demuestra su compromiso con la sociedad a nivel mundial, apoyando o implementando proyectos innovadores y emblemáticos. Además, la compañía cuenta con una sólida red internacional de fundaciones activas en India, Brasil, China, México, Rumanía y Estados Unidos. Estas organizaciones promueven proyectos de educación técnica, inclusión social y sostenibilidad ambiental con enfoque local.