La informática doméstica sigue a la baja

Se vaticinaba una caída significativa de las ventas en el ámbito de la informática doméstica para el año 2022 y los augurios se han cumplido, con un descenso de la facturación del 7,56%, aunque de una manera algo menos grave de lo esperado.

29/09/2023

El mercado de la informática doméstica sigue a la baja, aunque en 2022 aminoró la velocidad de la caída. Se pasó de una facturación en 2021 de 1.825 millones de euros a una de 1.687 millones, un 7,6% menos. La caída del año anterior había sido un pelín más brusca, ...

El mercado de la informática doméstica sigue a la baja, aunque en 2022 aminoró la velocidad de la caída. Se pasó de una facturación en 2021 de 1.825 millones de euros a una de 1.687 millones, un 7,6% menos. La caída del año anterior había sido un pelín más brusca, de un 8,3%, desde una facturación de 1.991 millones de euros. Lo que está claro es que el boom que vivió este segmento durante la pandemia definitivamente ha remitido y las necesidades de muchos de los usuarios están cubiertas de aquí a un futuro a medio plazo, cuando la obsolescencia de los dispositivos vaya haciendo que los cambiemos. La incertidumbre del escenario económico y la amenaza de la inflación, impulsada asimismo por la guerra de Ucrania, jugaron a la contra. Las webcams se posicionaron entre 2019 y 2020 como el artículo estrella, siendo indispensables para comunicarnos con nuestros seres queridos cuando no nos podíamos reunir más que de manera virtual, y en 2022 fueron la categoría que más retrocedió, un 30% en unidades y un 33% en valor.

Las únicas categorías que el año pasado tuvieron una evolución positiva fueron los proyectores frontales (subieron un 9% en unidades y un 16% en valor) y las impresoras no inkjet (avanzaron un 6% en unidades y un 13% en valor). Así, los proyectores se mantienen en el podio. Permanece el interés por ver el contenido en pantalla grande, improvisando un cine en casa en cualquier superficie.

Aunque los teclados retrocedieron un 4% en unidades, lograron subir un 4% en valor. Lo mismo sucedió con las calculadoras (-2% en unidades frente a un +12% en valor). Asimismo, el precio medio de estas últimas fue el que más ascendió en 2022, un 14%.

El resto de las 21 categorías que componen la informática doméstica cayó en 2022. La mayoría vivió un mejor comportamiento en la parte de valor que en la parte de unidades, a excepción de las ya mencionadas webcams, de los ordenadores de sobremesa (-12% en unidades frente a un -20% en valor), de los escanners (-10% frente a -13%), del software (-7% frente a -13%), de los productos de networking (-7% frente a -8%) y de los e-readers (-4% frente a -7%).

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