El concurso Pilabot, puesto en marcha por la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda de la Xunta de Galicia, en colaboración con los SCRAP de pilas autorizados en la Comunidad –European Recycling Platform (ERP), Ecopilas y Ecolec-, ha anunciado los ganadores de su cuarta edición.

Este curso han participado cerca de 32.000 alumnos de un total de 150 centros de educación primaria y secundaria de toda Galicia. Los centros participantes han recogido 46.649 kg de pilas y acumuladores usados, uno de los residuos más contaminantes que se generan en los hogares.

Los ganadores de esta edición han sido el IES Muralla de Lugo, que ocupó el primer lugar en términos absolutos, con más de 4,6 toneladas de pilas recogidas, y el CEIP Carmen García Carrasco de Cenlle, que se hizo con el primer puesto en la categoría de mejor ratio de recogida por alumno, con 99,53 kg.

Los segundos puestos recayeron en la categoría absoluta en el Colegio Plurilingüe Divina Pastora MM Franciscanas, de Ourense, con 2.346,95 kilos recogidos, y en la categoría de kg por alumno, en el CRA Amencer de Ribadavia, con 43,03 kg.

Los primeros premios de ambas categorías están dotados con 2.500 euros cada uno, mientras que los centros que hayan quedado en segundo lugar recibirán 1.250 euros. Los cuatro centros deberán destinar este montante económico a la compra de material escolar o deportivo.

Concurso de carteles #EuSonPilabot
El jurado también ha hecho públicos los ganadores del concurso de carteles publicitarios individuales #EuSonPilabot, en el que podían participar alumnos de primaria y secundaria de los centros participantes en el Concurso Pilabot.

Los alumnos premiados con una tableta son Noa Remuiñan Rojo, del CEIP Castelao de Ordes; Sara Mencía Quintía Pan, del CEIP Torre de Hércules da Coruña; Uxía Rodríguez Ramos, del Colegio Lar de Mos; Saúl José Hernández Cortez, del IES San Tomé do Freixeiro de Vigo, y Ana Lestao Ben, del IES Pedrouzo de Burela.

El concurso Pilabot tiene como objetivo fomentar el reciclaje de pilas entre la comunidad escolar y las familias de los alumnos, para al tiempo que se proporciona información y recursos didácticos para promover actitudes positivas que prevengan los problemas de contaminación que se pueden derivar si no se gestionan adecuadamente.

Además de los concursos, la campaña contó con la realización de medio centenar de talleres didácticos en los que se pretendía resaltar la importancia de las pilas en el día a día de las personas, incidir en la necesidad de su reciclaje e involucrar a toda la comunidad educativa en la campaña.