Este descenso se corresponde aproximadamente con el crecimiento que experimentó el subsector en el ejercicio 2017, por lo que podemos decir que esta categoría se encuentra en unos niveles de demanda similares a los del año 2016. La variación en unidades mostró en el año 2018 una caída incluso más acusada, de un 3,4%, con unas ventas que descendieron en casi 50.000 unidades, hasta los 1,3 millones, manteniéndose los precios medios sin variación significativa con respecto al ejercicio anterior.

La calefacción eléctrica continúa siendo en 2018 el subsector con menor peso de todo el Híper Sector, representando apenas el 0,4% de las ventas totales. Tratándose de una categoría, igual que sucede con otras en el Híper Sector Electro Hogar, cuya demanda es completamente estacional, y que además depende del rigor con el que el invierno azote los hogares, no se ha visto beneficiada en 2018 por las suaves temperaturas que han caracterizado la estación en casi todas las regiones del territorio nacional. El cambio climático, cada vez más innegable, que aleja año tras año el frío de nuestras latitudes, convirtiendo nuestros inviernos en otoños, no es tampoco un buen aliado para esta categoría de productos.

Por lo que se refiere a los canales de venta a los que el consumidor acude mayoritariamente a adquirir estos aparatos de calefacción eléctrica, observamos que sigue apostando un año más por los Grupos de Compra, los establecimientos electro por excelencia, en busca del asesoramiento y la profesionalidad que los caracterizan, en un 41%, seguido de lejos por las Cadenas (30%) y las Grandes Superficies Generalistas (24%), comprobándose que el precio no es el factor que más pesa para el consumidor a la hora de adquirir un producto de esta categoría.

Conveniencia

La calefacción eléctrica se distingue por ser la mejor solución para calentar, en momentos puntuales del invierno, habitaciones que no dispongan de calefacción sin gastar demasiado dinero. El coste de la electricidad, en nuestros días, es un factor importante para la mayoría de economías domésticas, y resulta importante tener en cuenta el rendimiento y el ahorro energético a la hora de comprar un aparato de calefacción, algo que cada vez tienen más en cuenta los fabricantes de esta categoría de producto. La calefacción eléctrica portátil tiene una serie de ventajas que la convierten en una opción elegida por muchos, frente a otras alternativas.

En primer lugar, proporciona una fuente de calor adicional, como complemento a los sistemas de calefacción central, cuando se requiere de un suplemento. Además, está disponible para su uso al instante, sin instalación. También resulta una opción muy versátil y portátil, al poder moverse de una estancia a otra con facilidad; y ahorra energía al calentar la habitación, y no la casa entera, reduciendo costes al centrarse en las estancias que está siendo ocupadas. Cuando no hace mucho frío, entre estaciones, puede usarse como una solución ideal durante los meses de primavera y otoño, cuando no es necesario utilizar la calefacción central para calentar toda la casa.