informe 80 NTElectromarket_2022 do en un plus añadido a la hora de decantarse por unmodelo u otro. Según la consultora GfK, la gama de televisores de 60 a 69 pulgadas ha crecido un 49%, los modelos de 55 a 59 pulgadas lo han hecho un 23% y los televisores de 65 pulgadas han triplicado sus ventas en menos de cinco años. Porque la tendencia ahora (acentuada durante el confinamiento de hace un par de años), es pasar horas y horas frente al televisor, consumiendo series y películas sin descanso, enlazando el final de una con el inicio de otra. Un camino que se inició con la llegada a nuestras vidas de las Smart TV, que incorporaban a su escaparate audiovisual un sinfín de variado contenido. Todo ello ha crecido de manera exponencial, sin duda, por la aparición de numerosas plataformas de streaming, entre ellas, Netflix, HBO, Amazon Prime, ATRESplayer, Filmin, Disney+, Movistar+, Rakuten TV, etc., que permiten al consumidor tener a su alcance todo tipo de opciones a golpe de clic. Funciones avanzadas e inmersivas España es, sin duda, un país pegado a la televisión, ya que el espectador se mantiene frente a la pantalla una media de 229 minutos diarios, casi el doble que delante de unordenador. Otras cifras indican que, por edad, los mayores de 65 años pasan, al día, cerca de 6 horas ymedia delante de la‘caja tonta’, mientras que, atendiendo al género, lasmujeres ven un 10%más la tele que los hombres. Eso sí, aún existe un 0,7%de hogares en nuestro país que no tienen televisor, frente al resto de hogares que, al menos, cuenta con uno de estos aparatos. Un progreso audiovisual que ha permitido al televisor convertirse en el electrodoméstico esencial de muchos hogares. Películas y series, los videojuegos (un sector que va al alza), asistir a una reunión de trabajo, seguir una clase por videoconferencia o, incluso, reproducir el contenido que se está visualizando en el smartphone, la pantalla del televisor adquiere una nueva dimensión. Porque se trata de una tecnología que avanza a un ritmo imparable. Con modelos con bordes casi invisibles y diseños minimalistas de gran amplitud, donde imagen y sonido ganan en precisión y facilitan esa experiencia inmersiva. Con colores más brillantes y nítidos, mejor calibrados, con mayor realismo, incluso llegando a adaptar la imagen proyectada a las condiciones lumínicas de la estancia, gracias a sus sensores incorporados. Sin olvidarnos, por supuesto, de que se puede visionar casi desde cualquier ángulo sin que esto interfiera en la calidad de lo que allí se está mostrando. Asimismo, algunos modelos más avanzados incorporan barra de sonido para ayudar a recrear una experiencia casi cinematográfica y totalmente envolvente, sin salir de casa. En otros, el mando queda relegado a un segundo plano, gracias a la compatibilidad que ofrecen con asistentes virtuales como Alexa o Google Assistant, que pueden ser controlados mediante la voz. Por otro lado, las funciones mejoradas basadas en Inteligencia Artificial (IA) comienzan a formar parte de los nuevos modelos de televisores. Así, esta tecnología permite, gracias a la combinación de varios altavoces repartidos por toda la pantalla y un algoritmo específico, analizar el contenido que se está emitiendo para adecuar la calidad audiovisual y sonora. Es por ello que, en los próximos años, aumentará la demanda de televisores más grandes (sobre todo, de 65 pulgadas), y modelos más personalizados. Por lo que respecta al sonido, la inclusión de la IA potencia más aún el audio inmersivo, lo que posibilitará la sincronización perfecta entre el audio y la acción que aparece en la pantalla, de tal manera que el sonido solo se reproducirá en el lugar exacto donde ocurre la acción. Todo ello por medio de la integración de las tecnologías basadas en soluciones de audio envolvente, como Dolby Atmos y DTS:X, que permitirá contar con una experiencia de entretenimiento más envolvente. Evolución de la televisión Tras más de 20 años de la desaparición de la televisión analógica, la rápida adopción de Internet y la transmisión digital han permitido poder ver esos contenidos online (que antes solo estaban disponibles para visualizar a través del teléfono móvil o la tableta, cuando apareció), en la propia pantalla de la televisión. Y al revés: poder ver nuestros programas favoritos de televisión en cualquier momento y en cualquier lugar, gracias a las distintas app de las cadenas televisivas. No es de extrañar, por lo tanto, que en Europa existan alrededor de nueve dispositivos conectados per cápita, mientras que en nuestro país el número de televisores conectados ha superado el de ordenadores personales, según el último informe del Estudio General de Medios, del pasado año 2021. De hecho, un 55,1% de los encuestados señaló haberse conectado a internet mediante una Smart TV, mientras que el 54,8% lo hizo a través del portátil. Una constante evolución tecnológica que ha llegado de la mano, como señalábamos antes, de la aparición de la Smart TV (con un 49% de presencia en los hogares españoles), por un lado, y de los agregadores y plataformas de streaming, por otro. Un nuevo tipo de consumo que nos hace estar pegados al televisor, gracias a la enorme oferta de formatos y entornos que disponemos, para acceder a un contenido premium, a la carta y personalizado que ha permitido que la televisión se convierta en unmedio omnicanal ymultipantalla. De hecho, un 53,8% de los hogares españoles cuenta con suscripción de pago a algún servicio de video en streaming. Lo que ha dado lugar a un nuevo consumo a través de pantallas conectadas, pues en España, según cifras del EGM, la televisión lidera el consumo de medios, con un 85,1% frente al 82,8% de Internet. Los fabricantes tampoco se han quedado atrás a la hora de ofrecer al consumidor nuevos modelos y oferta con los que disfrutar de su ocio. Así, los televisores FullHD, UltraHD o 4K aportan una resolución de calidad similar, pero si el aparato además incluye HDR, la imagen tendrá mayor contraste de color y se verá mejor. Por su parte, los sistemas OLED y QLED prometen colores mejorados y más definición. En concreto, la gran ventaja de los televisores con sistema OLED es que cada píxel individual recibe su propia luminancia y potencia, de tal manera que, cuando está encendido puede verse, pero si está apagado, no emite luz. Además, este tipo de televisores son extremadamente delgados. Por su parte, los sistemas QLED, aunque similares al anterior, no son iguales, ya que estos se basan en tecnología LED, pero añaden una técnica que superpone puntos autoemisores sobre los píxeles que ayudan a producir un mejor brillo, intensidad y precisión de color. Junto a ellas, la tecnología Mini Led, que se basa en leds más pequeños, otorgando un mayor brillo y contraste a la imagen; la Micro Led, compuesta por leds aún más diminutos; y NanoCell, formada a partir de nanopartículas para ofrecer unos colores todavía más realistas. En España, el número de televisores conectados ha superado el de ordenadores personales
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