Electromarket_342

electroguía2019-20 FOTOGRAFÍA DIGITAL 32 Malos tiempos para la fotografía digital El mercado de las cámaras fotográficas digitales sigue en caída libre, a pesar de los esfuerzos realizadosporlosfabricantesparareinventarseyofreceralconsumidorproductosqueleaporten un valor añadido extra frente a las cámaras integradas en los teléfonosmóviles. S on ya varios los ejercicios conse- cutivos en los que el segmento de la fotografía digital va dando se- ñales de su agotamiento y escaso recorrido en el mercado. Con pequeñas e insuficientes recuperaciones en años puntuales, el descenso a los abismos se va acumulando, y tras caer un 7% en el año 2018, en 2019 el sector ha protagonizado una caída de casi el 4%, arrastrando su facturación a los 221 millones de euros. Ya casi nadie consigue acordarse de aquellos años en los que las cifras llegaban al doble de las actuales, con una facturación en nuestro país en el ejercicio 2011 de 412 millones de euros. Los ingredientes que sin duda decidirán qué empresas se posicionan con más fuerza en un mercado que no pasa por sus mejores momentos, pero que por otro lado está muy lejos de morir, son una mejor conectividad con dispositivos móviles, cuerpos más ligeros y a la vez resistentes, mejores procesadores de imagen, capacidad para lanzar objetivos de calidad que no cuesten una fortuna, intensificar el uso de algoritmos de fotografía computacional y, muy importante para el gran consumo, lograr lanzar productos con precios más económicos, que sean más asequibles para el público en general, más allá de los profesionales. Crisis Covid-19 En un sector fuertemente afectado por los descensos consecutivos de la demanda desde aproximadamente el año 2010, podemos esperar que sufra de manera terrible los resultados de la actual crisis generada por la pandemia. Aún no se pueden analizar datos definitivos, pero hasta el momento, y haciendo una valoración de los datos ofrecidos por la CIPA ( Camera & Imaging Products Association ), la asociación que reúne a los principales fabricantes fotográficos del mundo, si en el mes de marzo ya se produjo un desplome severo de las ventas de cámaras sin espejo en Japón, reduciéndose a la mitad con respecto al mismo mes del año anterior, el mes de abril fue catastrófico, con una caída del 74% en el número de unidades vendidas. Tanto Nikon como Canon han dado sus previsiones para este año y en ambos casos son muy pesimistas, con caídas de ingresos hasta en un 70%. Estos datos se refieren a la producción y envío de cámaras y objetivos fotográficos de las marcas japonesas a todo el mundo, con lo que son datos globales sobre cómo