Giesecke+Devrient (G+D), proveedor de la eSIM de Apple, recuerda que en 2023 se pusieron en el mercado mundial más de 1.000 millones de smartphones habilitados para eSIM y se prevé que para 2027 uno de cada tres dispositivos con este tipo de tarjetas (integradas como un chip en el dispositivo) utilice activamente esta funcionalidad. Si bien los principales fabricantes de equipos originales de teléfonos inteligentes han adoptado eSIM y las han integrado en sus dispositivos insignia, según G+D, Apple está liderando el camino en lo que respecta a la adopción de eSIM. Así, los modelos estadounidenses del iPhone 14 y el nuevo iPhone 15 están equipados exclusivamente con eSIM, es decir, sin ranura para tarjeta SIM adicional para una SIM física.

A juicio de G+D, este tipo de tarjetas digitales son aún poco conocidas y están infrautilizadas a pesar de las ventajas que representan, que G+D resume en cinco fundamentales: su comodidad, su flexibilidad, mayor seguridad, sostenibilidad y las ventajas que aporta para el diseño de nuevos dispositivos.

Así, la primera de estas ventajas es para G+D la comodidad de este tipo de tarjetas frente a las SIM tradicionales, que es necesario adquirir en una tienda, solicitarse por teléfono o de manera online. Frente a ello, un contrato móvil digital para eSIM puede activarse en minutos, incluyendo la verificación de identidad. Además, las eSIM pueden gestionarse de forma totalmente digital y también permite hacer cambios de contrato de forma fácil.

G+D también destaca la gran flexibilidad de una eSIM al eliminarse la necesidad de que los consumidores hayan de reemplazar físicamente su tarjeta cuando, por ejemplo, cambian de operador móvil o para activar un nuevo perfil en un viaje al extranjero. Esto les permite elegir el operador más barato para llamadas y navegación web. Esta misma flexibilidad es evidente a la hora de cambiar de dispositivo al poder ser transferidas sin problemas a un nuevo terminal. G+D apunta como tercera ventaja la seguridad, al reducirse el riesgo de manipulación física. Además, la ausencia de una ranura para la tarjeta SIM reduce la posibilidad de que el dispositivo se dañe con agua, polvo o suciedad.

Igualmente, G+D señala que las eSIM son más respetuosas con el medio ambiente y tienen una huella de carbono menor que las tarjetas SIM tradicionales. El chip SIM integrado que reemplaza la tarjeta SIM física no utiliza plástico y se elimina, además, el embalaje y el transporte asociados al envío de tarjetas SIM tradicionales. Como quinta ventaja fundamental, G+D señala que la tecnología eSIM contribuye a la fabricación de dispositivos más pequeños, tanto por la necesidad de espacio significativamente reducida como por la eliminación de una abertura en la carcasa. Los dispositivos wearables, en particular, pueden centrarse más en la forma y el diseño, y ganar en elegancia sin comprometer la funcionalidad.

Según Philipp Schulte, director general de G+D Mobile Security, "en algunos casos, los consumidores todavía tienen dudas en utilizar la tecnología eSIM, aunque muchos dispositivos móviles ya incluyen una eSIM, además de la SIM clásica; y una de las razones es que las ventajas de esta tecnología aún no son suficientemente conocidas". "Con nuestras cinco propuestas concretas de valor", -añade Schulte—"queremos contribuir a poner en el lugar correcto a la tecnología eSIM que, en última instancia, resulta simplemente más cómoda que las tarjetas SIM insertables; además, ofrecen más seguridad y funcionalidad y aportan el beneficio general de facilitar un viaje del cliente completamente digital".

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