Por José Carrasco Es cierto que la historia de la empresa sí que nos vale y mucho, pues aquellas compañías con trayectorias sólidas tendrán más facilidades para obtener créditos y ayudas de sus proveedores y también aquellas que tengan un equipo humano potente y unido tendrán menos problemas con el personal ...
Por José Carrasco
Es cierto que la historia de la empresa sí que nos vale y mucho, pues aquellas compañías con trayectorias sólidas tendrán más facilidades para obtener créditos y ayudas de sus proveedores y también aquellas que tengan un equipo humano potente y unido tendrán menos problemas con el personal en un momento tan difícil emocionalmente. Pero la gestión del día a día ha cambiado, y los que estamos en permanente estado de alarma somos los responsables de las empresas, viendo y analizando cada nueva noticia que va saliendo, cada estudio, cada previsión y cada posible cambio de tendencia.
Si se reactiva una parte de la economía como el comercio en mayo, es previsible que no tengamos suficientes clientes hasta por lo menos el mes de julio ya que será un proceso lento, el consumidor no irá salvo urgencias a las tiendas y se lo tomará con calma.
Hay algunas certezas con las que podemos contar ahora salvo nuevo cambio radical en la evolución de la pandemia. Entre otras las siguientes:
Sin duda hay y habrá algunas certezas más, pero con estas seguro que tendremos que contar y no olvidarlas en ningún momento para no cometer errores. Pero lo más importante ahora es contar con salvar el máximo de empleos posibles y salvar los máximos comercios y pymes posibles, ya que no hay que olvidar que el 98,6% de las empresas en España son comercios, micropymes y pymes, y que, por lo tanto, si queremos salvar la economía habrá que salvar el tejido que hay y luego ya se podrán hacer planes para mejorar ese tejido a medio plazo.
Es el momento de demostrar que las empresas son éticas y son imprescindibles para que exista el estado de bienestar que todos queremos. Pero nunca nos acordamos de dónde salen los recursos económicos y salen sobre todo de los impuestos que pagamos las empresas. Sin empresas no hay país próspero.
Deseo a todo el mundo mucha salud, fuerza y moral y vamos a por todas juntos.