Cuando vemos un cartucho de tinta de marca muy barato, hay muchas posibilidades de que nos encontremos ante un cartucho falsificado. Por ello, es interesante hacernos una serie de preguntas antes de proceder a su compra, pues apostar por un cartucho falsificado no solo nos ofrece menos calidad en nuestras impresiones, sino que también pone en peligro la vida de nuestra impresora.

• La mayoría de cartuchos originales cuentan con fechas o códigos específicos de identificación en la caja y en el cartucho. Algunas marcas han incluido una etiqueta de seguridad en los cartuchos. Algunos, incluso, incorporan un código QR para escanear y obtener así una respuesta inmediata de la empresa para conocer el origen y originalidad del producto que tenemos entre las manos. Así, antes de comprar el producto, es aconsejable que comprobemos estas útiles medidas de seguridad.
• Es interesante también comprobar los embalajes en los que vienen los cartuchos y los tóneres. Normalmente, tanto las cajas como los materiales en los que vienen son también de alta calidad, y no se suelen vender tampoco envases dañados o de dudosa calidad. Hay que dudar de cualquier embalaje que esté abierto.
• Una vez abierto el embalaje, tenemos que examinar el cartucho de tinta. En general, tienen que tener buen aspecto, no tener daños, arañazos ni fugas de tinta o tóner. Las lengüetas del cartucho y del tóner tienen que estar intactas y, además, tenemos que fijarnos en la bolsa que incluye el cartucho, que tiene que estar intacta, sinónimo del sistema de protección de aire de fábrica.
• Tenemos que dudar también ante grandes ofertas. Las grandes compañías han conseguido reducir bastante el precio de los cartuchos, pero si nos encontramos ante ofertas muy exageradas y productos muy baratos, estamos ante un posible cartucho falsificado.
• Comprar en proveedores de confianza. Las marcas suelen tener una lista oficial de distribuidores de sus productos. Aunque nunca hay nada 100% seguro, tenemos más posibilidades de que el producto que adquirimos sea totalmente verdadero.
• Una vez lo estemos usando, si el cartucho nos ofrece un rendimiento de baja calidad o falla con mucha facilidad, es muy probable que estemos ante un cartucho que no es auténtico. Los cartuchos originales ofrecen impresiones claras, bien definidas y de buena calidad durante toda su vida útil.

Con todo, lo importante es que estemos atentos cuando hagamos la compra, pues una mala elección del cartucho puede pasar factura a nuestra impresora.