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Un respiro para la foto digital

Tras años de dificultades, el mercado español de cámaras digitales frena su descenso en picado. En 2015 las ventas subieron ligeramente, en parte, gracias a los sistemas compactos con objetivos intercambiables.

23/05/2016

El sector de la fotografía digital ha vivido una época difícil en los últimos años, a pesar de la constante innovación tecnológica de los fabricantes. Buena parte de la culpa la han tenido los móviles, que se han convertido en la única opción para muchos usuarios a la hora de ...

El sector de la fotografía digital ha vivido una época difícil en los últimos años, a pesar de la constante innovación tecnológica de los fabricantes. Buena parte de la culpa la han tenido los móviles, que se han convertido en la única opción para muchos usuarios a la hora de hacer fotos y compartirlas. Por eso, 2015 no fue un buen año para las ventas a nivel mundial, pero en España el sector se encuentra en mejor estado. A pesar de las dudas que surgieron a lo largo del año, las ventas nacionales han mejorado ligeramente respecto a 2014. De hecho, en términos generales, el año pasado el sector de la fotografía digital frenó su caída en España. Mientras en 2014 se obtuvieron 252 millones de euros, durante 2015 se alcanzó una cifra total de 258 millones. A priori no parece un gran avance y queda lejos de la facturación precrisis, pero supone una mejoría del 2,4% frente a la pérdida del 18% que se vivió entre 2013 y 2014. En esta mejoría puede tener algo que ver el estancamiento de los smartphones, que el año pasado comenzó a frenar debido a la gran saturación del mercado. La proliferación de estos dispositivos ha supuesto un duro golpe para las ventas de compactas digitales, sobre todo las de lente fija, que desde principios de siglo han acaparado la mayor parte del mercado de fotografía digital. La evolución de la tecnología fotográfica en los smartphones ha sido muy rápida y se ha adaptado a las necesidades de los habituales compradores de compactas de consumo. No sólo permiten hacer fotos con una calidad aceptable, sino que desde el propio dispositivo se pueden editar y compartir de forma inmediata en multitud de servicios online, algo con lo que las cámaras tradicionales no pueden competir, aunque lo han intentado.

Sin embargo, otras categorías están consiguiendo que el sector no caiga hasta los abismos. Las ventas de réflex digitales, tanto de consumo como profesionales, han ayudado a compensar un poco las pérdidas. Y, como se preveía desde inicios del año pasado, las cámaras compactas con objetivos intercambiables (CSC) también han jugado un papel importante en el equilibrio de las cuentas, al menos en España. Así, analizando los datos del cierre de 2015 se aprecian ciertos movimientos que permiten entrever hacia dónde quieren ir los usuarios de cámaras digitales. Por ejemplo, las réflex han vendido un 1% más de unidades que el año pasado y ya suponen el 31% del mercado total del sector. Esto podría indicar que se está iniciando un proceso de renovación del parque de estas cámaras en España. La tendencia creciente de grabar vídeos profesionales con réflex podría estar impulsando las ventas, que también han crecido en objetivos, tarjetas y accesorios. Por su parte, las compactas con objetivos intercambiables parecen ser la alternativa de los nuevos usuarios interesados en la fotografía, especialmente los amateurs.

Futuro de la fotografía digital y las cámaras digitales

Sube la venta de accesorios

El auge de los sistemas compactos con lentes intercambiables trae consigo un lógico aumento en la venta de determinados accesorios, como los objetivos. En general, entre lentes para réflex y para CSC, en 2015 se han vendido un 13% más de unidades que en 2014, lo que ha permitido que subiera la facturación un 15%. Además, cada vez se demandan más tarjetas de memoria de nueva generación. Esto tiene mucho que ver con la grabación de vídeo en alta definición y 4K, que requiere soportes más rápidos y con más espacio, como las tarjetas SDXC de 96 Mbps con capacidades superiores a 32 Gb. Otros dispositivos, como los smartphones y tabletas, que también las usan, han ayudado a mejorar estas cifras, y cada vez se venden más microSD de alta capacidad. El resto de accesorios para cámaras digitales, en general, ha experimentado una fuerte subida en 2015, mientras que el año anterior arrojaron cifras negativas. Tanto es así que se ha vendido un 39% más de complementos para cámaras, subiendo su facturación un 42%. Por lo que respecta al mercado de la fotografía digital, los principales actores siguen siendo las tiendas especializadas. Por su parte, las cadenas importantes cosecharon el 34% del total, mientras que las tiendas generalistas sólo abarcaron un 8% de cuota. Está claro que los tiempos han cambiado con respecto a la época dorada de las compactas baratas, cuando casi cualquiera podía venderlas. Ahora, los compradores optan por cámaras más caras y son más cautos, depositando su confianza en los expertos.

Una situación que ha provocado que muchos piensen que el sector de la fotografía está en sus horas más bajas y algunos, incluso, se aventuran a decir que le queda poco tiempo de vida. Pero como ya se ha demostrado, hay tecnologías que saben renacer de sus cenizas y recuperar su parte del pastel. La fotografía, como forma artística, es mucho más que simples recuerdos y difícilmente quedará en el olvido. Tecnologías emergentes como la grabación de vídeo en alta definición con réflex ya están ayudando a revitalizar los formatos de cámara más profesionales. Otras, como la realidad virtual, podrían abrir nuevos caminos a explorar, aunque ganar terreno a la competencia no va a ser fácil.

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