Los españoles pagan más por la gasolina por culpa de la falta de competencia

El problema que tienen los españoles con la gasolina ya se detectó en 2008 por Competencia, que presentó el diagnóstico y el tratamiento en 2009, pero aún así en 2010 el problema sigue en vigor. El problema viene por el elevado nivel de concentración que ofrece serios problemas de competencia. Los carburantes en España son distribuidos por Repsol que controla la parte más alta con un 58%, seguido por Cepsa con un 34% y BP con el 8%. Respecto a las estaciones Repsol tiene un 39%, Cepsa un 16% y el resto cuenta con un 8%, según los datos de 2009. Para solucionar este problema la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) realizó un balance del seguimiento de las propuestas lanzó hace dos años que ofrecía “numerosas barreras a la entrada y a la expansión de nuevos operadores en los segmentos minorista y mayorista del mercado de carburantes, que podrían estar restando intensidad competitiva y explicar en parte el diferencial de precios y de márgenes respecto a otros países europeos". Además, expedientó a Repsol, Cepsa y BP en 2009 por el sistema de contratos de sus redes de gasolineras, así como a Disa Canarias. De momento, estas medidas continúan sin aplicarse por lo que la CNC recomendó, entre otras medidas, la fijación por parte del Ministerio de Industria del precio de acceso a la red de transporte de hidrocarburos, así como la salida de los operadores al por mayor del capital de CLH. También pidió simplificar el proceso de tramitación de solicitudes de apertura de estaciones de servicio, elevar los criterios de competencia en las concesiones de gasolineras y facilitar la apertura de estaciones en grandes establecimientos comerciales.

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